sábado, 31 de julio de 2010

Literatura y emancipación cultural en Brasil

El llamado “Arte por el arte” se puede concebir como una sustancia que se aleja de la realidad actuante hasta conformarse en ideal. También se puede ver como una forma de concebir al quehacer artístico desobligado. Aunque ello representó en la Europa moderna más bien una forma de alejamiento de su realidad política por una utópica forma de hacer el arte de una forma más libre y despolitizada, sin dejar de ser social.[1]




En este sentido, la literatura es un arte social que en América Latina está muy comprometida, por lo menos desde el siglo XIX, debido sobretodo a los procesos bélicos históricos acaecidos en ese tiempo. Sin embargo, el caso de Brasil es aún más peculiar que el de los países de Hispanoamérica debido a que la forma de gobierno colonial brasileño sobrevivió hasta finales del citado siglo.



De esta forma, “el arte por el arte” literario es descartado en Latinoamérica. Así, la literatura en Brasil se ve mucho más imbuida en lo social, aunque la ha abordado de distinta forma según sus contextos colonial y moderno en que fueron desarrolladas[2]. Ello modificó también a la cultura nacional, siempre de trasfondo en ambos abordajes: en la primera, la literatura trata de explicar esta sociedad con un orden lógico y científico mediante modelos europeos; y en la segunda se enfocará no ya en un ordenamiento social sino más bien en una búsqueda por la emancipación cultural de Europa, sobretodo a partir de la segunda década del siglo XX con la Semana de Arte Moderno del 1922, que resalta esta búsqueda de la cultura más propiamente brasileña.[3]



Con ello, la indagación sobre la identidad a partir de la diferencia, de la otredad, será el tema fundamental de la cultura en Brasil: Os Sertões, de Euclides da Cunha, y Macunaíma, de Mario de Andrade son prueba de ello. En ellas se vislumbra la forma en que se plasma a la sociedad: desde una dicotomía civilización-barbarie (Da Cunha) hasta la búsqueda por “el brasileño” (Andrade). Es decir, que ambas significan un cambio en la literatura, que va de su cientifización a la artifización, pero siempre con la sociedad como centro. Y ello es una muestra de cómo es que en la literatura latinoamericana persiste el tema de la liberación social, muy arraigada en su historia.







ORLANDO LIMA



--------------------------------------------------------------------------------



[1] Rafael Gutiérrez Girardot. “I. El arte en la sociedad burguesa moderna” en Modernismo. Supuestos históricos y culturales. 3ª edición, México, FCE, 2004, pp. 41-68.



[2] Cabe resaltar aquí que la época moderna en Brasil es muy distinta de la modernidad hispanoamericana, ya que no se refiere a una época, sino a una recepción de la tecnología en el Brasil y a la búsqueda de un nacionalismo antropófago de todo lo que llega del extranjero expresado a través de la cultura.



[3] Eduardo Portella. “Tradición y modernidad. Entre la diferencia y la identidad” en Estudios brasileños. Horacio Costa (comp.), México, FFyL-UNAM, 1994, pp. 43-55.

1 comentario:

  1. tienes razón, cuando hablamos del arte tenemos que tomar en cuenta al artista de tal forma que su contexto es aquel que se deja ver en sus obras cosa que pasa en latinoamerica es que la mayoria de las obras de arte tienen una gran carga de simbolos referente a lo social, si bien esto es mas evidente como bien lo mencionas para el siglo XIX debido a la crecion de naciones en donde el arte se encargo de crear esas figuras o imagenes que permearan en lo colectivo y como punto de cohesión.
    pero tambien es cierto que esa busqueda de identidad y de lo propio frente a occidente y el mundo se hace mas rica y muchos de los discursos artisticos se mueven dentro de esta idea.
    sabemos que hay una serie de conceptos que hablan sobre estas discusiones sobre lo propio como la aculturacion,antropofagismo, entre otros quiza unos mas validos que otros pero hablan de esta riqueza de una combinacion de culturas en la busqueda de nuestra riqueza propia.
    retomando la idea de que la carga social en el arte es algo muy remarcado podriamos ver que para los años de postguerra mientras en occidente la plastica visual detonaba en la depresion del artista en america latina tenia que ver con un asunto pedagogico y de expresion de los movimiento en una forma mas colectiva como el caso del muralismo, caso que aun para 1980 con los movimientos juveniles en occidente enfocado en el no futuro y una idea del colectivo para sí, en el caso especifico de México se abrieron colectivos para asociar la idea del arte para la sociedad en la sociedad utilizando diferentes tecnicas que tenian que ver con los espacios abiertos.

    ResponderEliminar